ANTIGUOS HITOS KILOMÉTRICOS A ESCALA 1:10


ÚLTIMA ACTUALIZACIÓN DE LA PÁGINA: 22-02-2014



Los que tenemos ya alguna edad recordamos haberlos visto toda la vida a lo largo y ancho de la geografía nacional como elementos inherentes al propio paisaje de nuestras carreteras, ya fueran nacionales, comarcales o locales. Se trata de los típicos mojones, o hitos kilométricos, esos bloques de granito o de hormigón, según las zonas y las épocas, con forma de prisma de tres caras rematados en cúpula semiesférica y pintados sobre una base blanca en colores rojo, verde o amarillo (para las carreteras nacionales, comarcales y locales, respectivamente), con los números indicativos del punto kilométrico en color negro y los caracteres identificativos de la carretera en color blanco sobre un fondo rectangular rojo, verde o amarillo según la categoría de la misma, tal y como acabo de describir. Han existido también otras variantes geométricas de este modelo, por ejemplo con la cúpula o plataforma superior cuadrada, rectangular o plana, en lugar de semiesférica, pero nosotros en esta página, en principio, vamos a atenernos estrictamente al modelo convencional, que también es el más conocido y del que se conservan en la actualidad más ejemplares, generalmente en un estado de conservación muy deficiente, pues estos mojones o hitos kilométricos perdieron su función indicativa hace ya bastantes años, sustituidos en todas las carreteras españolas por las placas metálicas, mucho más modernas y funcionales, que conocemos en la actualidad.

Pasado y presente de las carreteras españolas. Utiel (Valencia)

Personalmente, nunca se me había ocurrido preguntarme acerca de la antigüedad de estos hitos kilométricos, es decir, cuándo fueron implantados en las carreteras españolas, quizá porque mi curiosidad e interés en estos elementos viarios no era tan grande como para investigar sobre ellos hasta ese punto. Sin embargo, una vez surgida la idea de realizar un extenso y detallado video documental sobre la antigua N-III, en el que estamos trabajando hoy en día, mi interés acerca de los viejos mojones de piedra se incrementó considerablemente, pues en los trabajos a pie de carretera para el documental los hemos encontrado y seguimos encontrándolos en gran número (e incluso ahora buscándolos deliberadamente) y desde luego forman parte esencial de la propia historia de la carretera. Como fruto de las diversas investigaciones realizadas en internet para nuestro proyecto, descubrí un reciente e interesantísimo blog, enlazado a este, en el que, entre otras materias, sus autores, ingenieros de caminos aficionados a las carreteras antiguas, tratan precisamente del origen de los hitos kilométricos españoles a los que nos referimos aquí:


Y así pues, como se detalla en esa entrada acompañada de interesantes ilustraciones, fue al finalizar la guerra civil cuando se estableció por el Gobierno recién instaurado un ambicioso plan de carreteras más enfocado a la normalización reglamentaria de sus características técnicas y de sus diferentes elementos indicadores y de protección, que a la reconstrucción o mejora de las mismas, tarea que habría de esperar algunos años ante la escasez de recursos económicos de la posguerra. Gracias a tan oportuno reportaje hemos podido saber que estos característicos mojones kilométricos empezaron a poblar las cunetas de nuestras carreteras en el año 1939, así como conocer con exactitud sus colores y medidas reglamentarias. No se habla, en cambio, de su proceso de fabricación, manipulación y transporte, ni de quién o quiénes estaban encargados de su mantenimiento y conservación, aunque cabe suponer que sería tarea del cuerpo de peones camineros, mientras existió este importante gremio de trabajadores de la carretera, y a su desaparición tales atribuciones pasarían a manos de los empleados de obras públicas estatales o en su caso regionales y locales.

Clásica casilla de peones camineros en Biar (Alicante)

Sea como fuere, lo cierto es que en la actualidad aquellos hitos kilométricos de piedra, verdaderos iconos nacionales a la altura del toro de Osborne, los postes telefónicos de madera paralelos a las carreteras o los anuncios dispuestos en azulejos de colores sobre las fachadas (como por ejemplo el del famosísimo Nitrato de Chile), han caido en el olvido y el abandono más absolutos, si bien muy recientemente es posible observar cierto vago interés en su conservación ornamental, y algunos han sido repintados en sus colores originales, aunque borrados los caracteres alusivos a la información kilométrica concreta que ofrecían y en muchos casos también a la carretera a la que pertenecían.

Hito kilométrico de la antigua N-III en la gasolinera de Venta Quemada (Valencia)

Todos estos aspectos recién descubiertos acerca de los hitos kilométricos me inspiraron la idea, hace unos meses, de contribuir modestamente a su preservación histórica haciendo réplicas a escala de los mismos, muy a pesar de que mis habilidades plásticas y artísticas dejan bastante que desear, pero con la esperanza de que mi entusiasmo fuera suficiente para paliar las carencias. Un entusiasmo que, desde luego, jamás podrá superar la falta de habilidad, la destreza y la técnica, pero que, unido a la paciencia y a la perseverancia, acaba por rendir unos resultados cuando menos aceptables que invitan a continuar con esta pequeña tarea artesanal que no persigue reconocimiento ni intención comercial alguna. ¿Un pasatiempo, una distracción, una excentricidad? Sin duda pudiera ser. Pero una vez desencadenado el proceso creativo surgen realidades que al principio eran desconocidas o estaban ocultas. Por ejemplo, que todos o casi todos los españoles de cierta edad, como decía al comienzo, tenemos una estrecha vinculación biográfica concreta con alguno o algunos de los antiguos hitos kilométricos y con alguna o algunas —y a menudo varias— de las carreteras españolas a las que hacen referencia. Los que han nacido y viven o han vivido en un pueblo, porque una carretera llega hasta él o lo atraviesa, y más cerca que lejos ha existido en el pasado reciente un mojón kilométrico característico, como seña de identidad ineludible del lugar. Los que hemos nacido en grandes ciudades y vivimos o hemos vivido en ellas, porque también en las grandes ciudades españolas se conservan aún muy escasos ejemplares de estos hitos de piedra. En Madrid, por ejemplo, yo tengo noticias de la existencia de dos de ellos, uno perteneciente a la antigua N-II, ubicado en la calle de Alcalá, y otro perteneciente a la antigua N-III, en la Avenida de la Albufera, frente al campo del Rayo Vallecano, el correspondiente al kilómetro 5 de dicha carretera.

En tiempos fue el km 5 de la carretera Madrid-Valencia. Se ha conservado, pero ahora como un mojón mudo. (Fotografía de Google Street View)

Pero independientemente del lugar de origen o de residencia, lo cierto es que todos o casi todos tenemos una o varias carreteras que han sido o siguen siendo referentes de nuestras vidas por muy diversos motivos, en unos casos asociados al ocio y en otros al trabajo, y en esas carreteras también había mojones kilométricos que probablemente todavía recordamos. Esto le otorga un valor simbólico sentimental y personal a cada réplica a escala de uno de estos mojones, más allá de sus meras cualidades ornamentales o artísticas. Es un regalo original, curioso y entrañable, en suma.

Desde un principio tuve muy clara la condición de que estas réplicas a escala de los antiguos hitos kilométricos debían ser modeladas en barro, arcilla o un material similar que imitase la naturaleza y textura de los elementos originales. Algunas personas me habían sugerido hacerlas en madera o plástico, pero lo descarté, pues no sólo no cumplían esta primera premisa, sino que además su manipulación resultaba tanto o más complicada que la del barro. Como mis conocimientos de alfarería son nulos y desde luego no cuento con un horno de cocción específico para este tipo de artesanía, el hecho de descubrir que existe una masa de modelado que no necesita cocción ya me puso en el buen camino. Para mi tarea precisaba además de otros elementos y utensilios, como pinturas, pinceles, lija y pequeñas herramientas de modelado del barro. En una tienda de bellas artes cercana a mi trabajo encontré todos estos materiales y me puse enseguida manos a la obra.




No es la intención de esta página el servir como tutorial de alfarería, bricolage o manualidades en general, en primer lugar porque no soy la persona más indicada para ello, y en segundo porque mi propósito es el de mostrar aquí el trabajo acabado y no sus fases previas. Sin embargo al principio, al menos brevemente, sí nos detendremos en estos aspectos para que puedan apreciarse las dificultades y los avances realizados desde las primeras piezas defectuosas y desechables, hasta la consecución final de los mojones terminados con un nivel de calidad y realismo aceptables para un profano en la materia. El punto de partida inicial vino determinado por el descubrimiento de la entrada del blog Carreteras históricas, antes citada, en donde se ilustra con detalle acerca de la geometría y medidas reglamentarias de estos antiguos hitos kilométricos:


El segundo paso consistió en establecer una escala concreta para las piezas a modelar, y después de varias pruebas y medidas estimé como más adecuada la escala 1:10, lo que suponía un mojón kilométrico con una base triangular equilátera de 6 cm, y una altura total de la pieza de unos 11 cm. Me había planteado incluso trabajar a una escala 1:5, y en un alarde de fantasía irrealizable también a escala 1:1, es decir, a tamaño real, pero en ambos casos, y sobre todo en el segundo, la cantidad de material a emplear (masa y pinturas) lo hacían por lo menos económicamente inviable, sin entrar en otras consideraciones técnicas de manipulación, peso y tamaño.

El tercer paso era determinar el modelo auténtico a copiar, algo no esencialmente necesario, pues podía reproducirse cualquier mojón kilométrico, existiera o no, fuese real o imaginario, pero para conferirle mayor realismo a mi trabajo me fijé en el del km 163 de la antigua N-III a su paso por la localidad conquense de Valverde de Júcar, en el trazado primitivo de esta carretera, que se abandonó en los años cincuenta. Dicho mojón sigue existiendo y lo habíamos fotografiado unos meses antes en un recorrido que hicimos por la zona como parte de los trabajos para el documental.


La tarea, como pude comprobar enseguida, no iba a ser nada fácil, aunque pueda parecer sencillo a simple vista tomar un bloque de barro y modelarlo con la forma geométrica deseada. Ni siquiera me planteé de partida el utilizar moldes o plantillas ni ninguna otra herramienta que no fuesen mis propias manos. Los primeros resultados fueron desastrosos:


El barro fue tomando unas formas caprichosas (aristas redondeadas, geometría campanuda) que en poco o en nada respetaban la fidelidad al modelo original. Era necesario fabricarse un molde, y me hice uno muy rudimentario en madera, pero los resultados tampoco mejoraron significativamente. No obstante, con estas piezas desechables de carácter experimental podía empezar las pruebas de pintura y rotulación para sacar conclusiones aplicables al modelo o modelos válidos que finalmente, estaba seguro, acabaría consiguiendo. Los resultados obtenidos con los pinceles fueron igualmente desalentadores:


Creo que esta vez sobran los comentarios al respecto. Durante todo este proceso fui subiendo las imágenes y las impresiones de mi trabajo a la sección de modelismo del foro Camionesclásicos.com (enlazado en este blog), y fue allí en donde personas entendidas y experimentadas en tareas manuales de todo tipo (alguna incluso había modelado anteriormente un mojón kilométrico) me asesoraron, instruyeron y alentaron en mi tarea, sugiriéndome técnicas y procedimientos que en la mayoría de los casos mi propia torpeza me impidió llevar a cabo. Sin embargo, he de reconocer aquí y ahora que fue gracias a ellos que no desistí en mi empeño y no me detuve hasta conseguir los resultados deseados.

Descartada la utilización de un molde, que por otra parte resultaba ya de por sí difícil de construir, opté por fabricarme unas plantillas de plástico rígido obtenidas de los estuches de viejos videos VHS. Bastaban cuatro plantillas, una para la base triangular de la pieza y otras tres para cada una de sus caras. El remate superior semiesférico, en cualquier caso, era tarea estrictamente manual que no ofrecía tantas dificultades como el modelado recto de vértices y aristas. Con este procedimiento, muy similar al utilizado en la construcción por los encofradores, obtuve por fin los resultados pretendidos, muy mejorables aún, sin duda, pero por lo menos bastante satisfactorios y que podían darse por definitivos:


El secado y endurecido final de los mojones tardaba en completarse unos tres o cuatro días, pero la utilización de diferentes juegos de plantillas ofrecía la posibilidad de tener varias piezas modeladas al mismo tiempo, a la espera de los procesos posteriores de lijado y pintura. Y fue precisamente la pintura, y sobre todo la rotulación de los caracteres, una de las tareas más complicadas e ingratas del trabajo, y sigue siéndolo incluso después de haber mejorado mi técnica, pero para no extendernos más en estos preámbulos explicativos, es hora de presentar los primeros resultados:


El primer mojón terminado, visto desde todos los ángulos

Objetivo cumplido, pues. Después de varias semanas e intentos infructuosos, tenía por fin la primera pieza terminada. Su peso aproximado es de unos 400 gramos, pero el consumo total de masa de modelar, incluyendo los primeros ejemplares fallidos, fue de dos kilos en bruto, pues el barro al secarse pierde cierto peso y volumen.



28 comentarios:

  1. Enviado el 07/01/2013 a las 12:07

    Es curioso ver como por esas carreteras comarcales que se conocen desde que somos niños han ido desapareciendo esos peculiares y únicos bloques de tres caras labrados a mano en piedra, y a la vez apareciendo decorando los jardines de chalet privados en urbanizaciones en la zona de Valdemorillo y alrededores, (Madrid); la dejadez de los responsables de la CAM es publica y notoria en estos temas, tambien la picaresca y ladronismo del dueño de un vivero cercano a Valdemorillo, con nombre de piedra, que por las noches y durante mucho tiempo se ha dedicado a llevarselos y arrancarlos de su ubicacion con un camion grua, esquilmando todas las carreteras comarcales en un radio muy amplio, asi lleva años, supongo que seguira en su labor pero ya fuera de la provincia que está completamente aniquilada.
    Deberia ser denunciado y restituir todos esos iconos de una época a su lugar original , y ser protegidos como el toro de OSBORNE o EL TIO PEPE, pero la indolencia de los responsables y autoridades ,y la desaparicion de los entrañables camineros dan pie a que ocurran estas cosas, como tantas otras que nos hacen diferentes, que pena.

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  2. Enviado el 28/12/2012 a las 20:47

    Gracias Juan López, gracias Alfonso, por vuestros comentarios. En efecto, cuando comencé modelando los hitos kilométricos en barro no podía sospechar la repercursión que acabaría teniendo el tema ni el enorme interés que habría de suscitar. No soy pionero en esta tarea artesanal, pues me consta que otras personas ya lo hicieron antes en diferentes escalas y materiales, si bien en tiradas muy cortas de uno o dos ejemplares, que se sepa. Yo llevo más de veinte en la actualidad, y con otros tantos pendientes por delante, muchos de ellos por encargo. Cuando me canse definitivamente lo dejaré para dedicarme a otras cosas que nada tendrán que ver con esto, pero mientras tanto me estoy empleando a fondo. Por supuesto me gustaria ver ese hito gallego que comenta Juan y todos aquellos que sigue fotografiando Mario para su magnífico blog. No es sólo una cuestión de arqueología vial e histórica, sino también una cuestión estética, pues aquellos antiguos hitos kilométricos, con todas sus variantes morfológicas y cromáticas, son verdaderamente bonitos de ver. Nada que ver con las actuales placas metálicas con las que fueron sustituidos hace bastantes años.

    Saludos.

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  3. Enviado el 28/12/2012 a las 13:10

    La verdad el tema de los Mojones trae cola…A simple vista parece un tema intrascendente pero no es así. Da pie a hacer arqueología vial e Histórica.
    Desde hace unos meses que redescubrí el tema de los mojones están en el punto de mira de mis observaciones y reportajes fotográficos.
    Sería de agradecer que todo el mundo que tenga información de estos mojones que se comentan de formas fuera de lo normal fueran poniendo fotos.

    Saludos y gracias
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  4. Juan López Bedoya16 de enero de 2013, 22:53

    Enviado el 28/12/2012 a las 12:47

    Hola soy Juan López Bedoya, un geógrafo físico de Santiago ahora interesado en las vías históricas. Me ha gustado mucho esta web y quería comentar la existencia de un curioso mojón en la C-542 (Betanzos-Mesón do Bento), que une realmente betanzos con Santiago utilizando después la C-550 que atraviesa Galicia de norte a sur desde el Golfo Ártabro hasta Tui. Bueno, pues es un mojón que hay a la altura de Abegondo, a la derecha en dirección Betanzos. Nunca lo he fotografiado pero siempre me fijo en él. Pronto te enviaré una foto. Creo que es miriamétrico, pues se encuentra en el km 10 de esta vía. En vez de ser en tetraedro, es un prisma rectangular tumbado con abombamiento superior, y bastante grande. Ya no tiene los colores antiguos, pues ahora está pintado de naranja, como muchas carreteras provinciales en Galicia. La carreteras se llama ahora AC-542. También quería comentar que entre Pontedeume y Ferrol, en la antigua nacional VI, hay mojones típicos como los que describes en esta web, pero con diferencias. Algunso tienen un rectángulo grabado, otros marcas de la N-651 que es ahora este tramo de la N-VI , y otros están mudos, la mayoría. Un abrazo y me gustan mucho tus reproducciones. Quizá haga uno en pequeñito con mis hijos para que hagan una manualidad. Abrazos

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  5. Enviado el 21/11/2012 a las 1:05

    Gracias de nuevo, Trikineitor. En efecto, poco a poco voy logrando mayor realismo en los mojones, digamos que ya he conseguido las habilidades necesarias para su manufactura. Por supuesto, como te comento en un e-mail que te acabo de enviar, me gustaría mucho hacerme esa VI Ruta de los Puertos, y creo que la próxima edición no me la voy a perder.
    V´sss.

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  6. Enviado el 20/11/2012 a las 22:42

    Hola Route1963, interesantísimo me ha parecido toda tu explicación, y la verdad, se aprecia como los mojones van mejorando a lo largo de toda tu exposición, los últimos ciertamente parecen reales.
    Me has dado un gran idea, lástima que como artesano sea más que pésimo….
    Aún con el tiempo pasado, he incluido en mi página un enlace a tu blog, muy, muy recomendable.
    Un saludo y espero que nos veamos pronto o lo más tardar en la VI Ruta de los Puertos…
    Rafagas en V.

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  7. Hola Route 1963.Agradezco lo del mojon artesanal.Cualquier PK sera bueno.
    Te dejo mi correo personal:
    alfonsosu@gmail.com
    Un saludo y gracias
    MAS

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  8. Enviado el 08/11/2012 a las 21:09

    Muchas gracias por tus elogios. La filosofía de mis mojones kilométricos es exclusivamente artesanal y sin intención comercial, es decir, que no los fabrico a nivel industrial y tampoco los vendo, sino que regalo algunos y otros me los quedo yo. Están modelados y pintados a mano, sin trampa ni cartón. Además, cada ejemplar es único y exclusivo, no repito puntos kilométricos de la misma carretera. Hasta la fecha sólo he trabajado a escala 1:10, aunque no descarto aumentar esa escala hasta el 1:5, pero para ello tengo que fabricarme antes unas plantillas nuevas. Dime qué punto kilométrico exacto quieres de la N-III, (salvo los kms. 5, 163 y 200, que ya están hechos), y te hago una réplica a escala 1:10. Unicamente no puedo garantizarte cuándo estará terminado, porque ahora mismo no tengo ninguna pieza en bruto para pintar, pero puede ser cuestión de un mes o dos. En todo caso antes de la primavera de 2013, seguro.
    Con respecto a las carreteras de Burgos, todas son muy interesantes y tienen paisajes y parajes dignos de ser visitados. Hay ruinas, campos y entornos solitarios y abandonados por todas partes. Por ejemplo, está la antigua C-629, que tiene, o tenía, incluso un cementerio de hitos kilométricos abandonados. En este enlace puedes verlo:

    http://www.camionesclasicos.com/FORO/viewtopic.php?f=9&t=21907

    Saludos.

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  9. Hola Route 1963.Conocia tu blog hace tiempo pero ahora lo estoy mirando con las detalle y me parece realmente bueno y elaborado.
    Sobre al tema de los mojones que haces de arcilla. No he visto en tu blog si los comercializas o los haces para ti. Si los vendes me gustaría comparte uno de tamaño de grandecito (un palmo) de la N-III.
    Otro tema ya que eres un experto el Carreteras antiguas me gustaría que me recomendases si conoces alguna carretera o ruta curiosa que este por Burgos. He mirado la antigua n620 ¿la conoces?.
    Saludos
    MAS

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  10. Enviado el 30/09/2012 a las 22:46

    Yo estoy investigando por algunos y encontre en la PO-551 KM 1 de Marin y el del Km anterior esos marcan C-550 KM 8/ ” KM 9. Hay otro en el Lago Castiñeireas (Cotorredondo, Galicia) un poco antes de subir al lago en la PO-0103, el mojon marca la C-540 o algo asi pero no puedo reconocer el kilómetro.Intentare más ¡Adiós! (por ahora).

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  11. Enviado el 28/09/2012 a las 15:47

    Gracias, Antonio, un buen apunte, por supuesto. Ciertamente cuando nos cayó aquel aguacero monstruoso, hace ya 16 años, yo tenía esa idea estereotipada de la provincia de Almería concebida en su totalidad como un desierto árido y extremadamente caluroso, sin hacer distinciones entre unas zonas y otras dentro de la propia provincia que, en general, es la zona más seca de Europa con diferencia. Y aquel episodio se debió, en efecto, a una simple tormenta mediterránea, violenta y copiosa, pero nada más. Con respecto a los mojones, y antes de volver a ponerme con las manos en la masa, y nunca mejor dicho (he tenido la súbita idea de dedicarle a medio o largo plazo al menos un hito kilométrico a todas y cada una de las provincias españolas), creo que haré un breve reportaje documental en video con mis creaciones hasta la fecha y alguna cosa más relacionada. Saludos.

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  12. Enviado el 28/09/2012 a las 14:42

    Un apunte meteorológico-geográfico: la zona norte de Almería, por la que discurría la N-342 (y hoy lo hace la A-92Norte) tiene un clima totalmente distinto al que predomina en toda la zona sur, y que se ha convertido en estereotipo del conjunto de la provincia. El clima no es árido en absoluto, sino que puede calificarse como mediterráneo con toques de clima continental, debido a la altitud. Un ejemplo, la localidad de Chirivel, donde estaba (porque dudo que ya esté, aunque quiero comprobarlo) el kilómetro 127, está a 1.039 metros de altitud. Las lluvias no llegan a ser abundantes, pero no son para nada escasas; y, sobre todo, los inviernos son muy duros, con nevadas abundantes con frecuencia. Y a sólo unos kilómetros al norte (en la cara septentrional, umbría, de la sierra de María), el clima es aún más extremo y las lluvias más abundantes.

    Por ello, no creo que fuera una total casualidad el que te cayera un diluvio circulando una vez por allí. Sí una circunstancia puntual, en tanto que se trataba de un aguacero (algo habitual en el Mediterráneo en determinadas épocas del año, pero a la vez ocasional porque se registra de forma episódica), pero nada fuera de lo común, salvo por la intensidad de la lluvia que comentas. Y es que la antigua N-342 atraviesa, en su parte más oriental, una zona que poco tiene que ver con los estereotipos de Almería e, incluso, de Andalucía; de hecho, por el clima, paisaje y hasta formas de vida llega a recordar a veces a Castilla.

    ¡Saludos, reconociéndote el trabajazo por la confección de los mojones y toda mi admiración hacia ello!

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  13. Enviado el 03/09/2012 a las 20:46

    Por lo que he visto en algunas fotos, sí que parecen más pequeños que los del Plan Peña, pero habrá que conocer sus medidas reales. Sin embargo, lo cierto es que serán más complicados de modelar a escala, porque los trazos rectos entrañan mayor dificultad que los trazos curvos, y precisamente la plataforma superior de estos hitos del CNFE es de forma cuadrangular.

    Saludos.

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  14. Enviado el 03/09/2012 a las 15:46

    Gracias por el dato de los mojones, si tengo tiempo los busco y te digo si son ésos. Ya de entrada son bastante más pequeños que los que estás haciendo tú.

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  15. Enviado el 02/09/2012 a las 10:37

    Gracias, Jean Luc. No pude hacer un molde para los mojones, era muy difícil, así que me hice unas plantillas de las que me ayudo para el moldeado de las piezas. Efectivamente, como dices, en el norte de España abundan otro tipo de mojones diferentes a los del Plan Peña de 1939, inspirados en modelos más europeos, más cuadrados o rectangulares, sin la parte superior curva, al estilo de los del CNFE de los años 20 del pasado siglo.

    Hola de nuevo, Eva. Los hitos del CNFE tenían forma de prisma rectangular coronados por un sombrerete cuadrado. En el blog “Carreteras históricas” enlazado en este o en mi blog principal, se habla de ellos e incluso pueden verse fotografías de algún ejemplar. Y precisamente le he propuesto a uno de los autores de ese blog, ingeniero de caminos y profesor universitario, modelar uno de aquellos hitos del CNFE. Estoy a la espera de que me mande un plano, dibujo o croquis con las medidas exactas de la pieza para poder hacerlo a escala. Lo de la base de mis mojones en realidad es una lámina de fieltro autoadhesivo, no muy antideslizante que digamos, pero que cumple una función estética en el acabado del mismo, al tiempo que estabiliza su base y le impide arañar o rayar las superficies sobre las que se coloque, por ejemplo muebles de madera o mesas de cristal.

    Saludos.

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  16. shulamithie@yahoo.es
    79.158.29.168
    Enviado el 02/09/2012 a las 8:47

    Interesante, Jean-Luc. ¿Cómo son los mojones del plan de Primo de Rivera? He visto muchos mojones más pequeños que éstos y casi casi rectangulares pero terminados en punta. ¿Serían ésos?

    No me había fijado hasta ahora en la base de los mojones. Imagino que lo verde será algún antideslizante, ¿no?

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  17. Enviado el 01/09/2012 a las 23:31

    Hola, tu hubieras podido hacer un moldo para producir tanto mojones…

    Soy un francés y he recorrido muchas carretras españolas con mis padres durante mi infancia y puedo decir que esos viajes son unos de mis mas bonitos recuerdos de mis jovenes años : los vehiculos, Pegaso primero, pero tambien las nacionales del plan REDIA, entonces muy nuevas, muy modernas con largos arcenes, tercer carril en las subidas, y los mojones tambien, que era imposible no divisar.
    Pues esos mojones son un poco de mi infancia (finales de los 60 y 70) y me ha agradecido mucho ver alguien interesarse y reproducir esos objetos tan castizos.

    Como hechos en este tema, puedo darte algunas informaciones mas :
    -en 1974 y 75, pasé por varias carreteras nacionales de Navarra y noté que los mojones alli no eran esos del plan Peña, sino mojones mas pequeños de tipo “francès”, de hecho eran los del CNFE, del plan de Primo de Rivera.
    -este verano, fue en Mallorca, y tuvé la muy buena sorpresa de ver que alli, TODAOS los mojones son de tipo “Peña”, incluso los mas modernos, perfectamente conservados, y con colores naranja o amarillo segun el tipo de carretera. Unica diferencia : la rotulacion es sobre une chapa metalllica y no pintada directamente. Pero tiene un aspecto maravilloso…
    -en la autovia Besalu-Olot (Girona), he visto, en 2008,pero sin poder captarlo un antiguo mojon recuperado para senalar un km de este eje, con color…azul, tenia una muy buena cara.

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  18. abandonoseneltiempo16 de enero de 2013, 23:02

    Enviado el 23/07/2012 a las 23:46

    Hola colega otra vez, no te preocupes dejo el mismo enlace que tengo en mi blog de tu página. Al final fui a donde te dije a visitar esa carretera poco transitada, si te digo la verdad no realice ninguna foto, poco está en perfecto estado la carretera, no circulan muchos coches por que hicieron una carretera mejor, pero la del Muriano no esta tan mal como yo creía, así que no merece la pena que te mande las fotos que te prometi. Pero lo que si te mando seguro son lo de los mojones kilometricos, ya te mandare las fotos, un saludo.

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  19. Enviado el 22/07/2012 a las 10:55

    Gracias, me alegro de que te guste mi trabajo, tanto el de los mojones (o hitos kilométricos, como también se denominan), como el de la antigua N-III, Madrid-Valencia. Conozco tu blog y lo sigo con frecuencia, pues tiene unos contenidos muy interesantes. Por supuesto, mándame las fotos que quieras, para echarles un vistazo. Con respecto al tema de mis blogs, decirte que el principal es el de Blogspot, pero como he tenido problemas técnicos últimamente, he creado además este otro blog gemelo en WordPress, al que remiten algunas de las entradas y páginas del principal. No es necesario que enlaces este en el tuyo, sino el principal, el de Blogspot (si no lo tienes enlazado ya), porque como te digo se accede a este a través del otro, y así, entre uno y otro, se van complementando los contenidos. Muchas gracias por tu comentario. Un saludo.

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  20. abandonoseneltiempo16 de enero de 2013, 23:03

    Enviado el 20/07/2012 a las 20:40

    Joe macho eres un crack, me ha encantado este reportaje, que como he visto continuara, es espectacular route1963. Yo no sabía que a eso se le llamaban mojones; si te digo la verdad por la comunidad autinima por donde vivo que es Andalucía no te puedes imaginar los que hay tanto en las carreteras más antiguas como las un poco más modernas. Si quieres te mando fotos de los mojones que hay por aquí. No se si lo sabes, pero mi blog es principalmente de lugares abandonados, pero quiero incorporar reportajes sobre carreteras abandonadas o de poco transito, cuando lo tenga te lo dire. Te avanzo un poco es la carretera que va al pueblo del muriano en Córdoba( me refiero a la antigua) no te puedes imaginar las curvas peligrosas que había en esa carretera antiguamente y los muchos accidentes de coche que provacaba está. Para finalizar decirte que el reportaje sobre la antigua carretera que iba a Valencia es el que más me ha gustado. Y por cierto este es otro blog que tienes o es el mismo? es para agregarlo o no a mi blog. Un saludo colega. Y sigue así que eres un fenomeno.

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  21. Enviado el 17/07/2012 a las 12:01

    Lo has expresado a la perfección. :)

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  22. Enviado el 16/07/2012 a las 18:27

    Desde luego, también lo que nos transmiten algunas carreteras tiene un alto componente emocional, y esas emociones pueden proceder de la infancia o surgir repentinamente en la edad adulta. Pero yo creo, sobre todo, que es cuestión de un estado de ánimo favorable en un momento determinado, en un instante fugaz que no tiene porqué ser perdurable. Una misma carretera no te transmite siempre lo mismo necesariamente, puede haber incluso sensaciones contradictorias dependiendo de la ocasión.

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  23. Enviado el 16/07/2012 a las 13:30

    Normalmente esas carreteras que nos dicen algo son las que hemos recorrido de críos, aunque también puedes recorrer por primera vez una carretera con 30 tacos (y hasta unos días antes ni haberte imaginado que existía) y a partir de allí convertirla en esa carretera personal por la que nadie entiende que vayas. Esto también me ha pasado. ;)

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  24. Enviado el 15/07/2012 a las 19:53

    La pasión o devoción hacia alguna carretera determinada tiene que ver sobre todo con las circunstancias biográficas de la persona: experiencias, vivencias, recuerdos… Por eso una carretera que para un individuo tiene un significado especial, a otros individuos les deja indiferentes. En realidad ninguna carretera posee por sí sola ningún significado más allá del que quieran ver en ella quienes viajan por su trazado. Y con respecto a los mojones a escala, la idea principal es precisamente la que tú apuntas, que no caigan en el olvido, a pesar de que -o precisamente por ello-, la mayoría de esos hitos kilométricos hace tiempo que dejaron de existir. Si encuentras en este blog (o en el blog principal del que deriva este, mucho más completo) esas respuestas que llevas buscando hace tiempo, me sentiré honrado por ello. Gracias por tu comentario.

    Saludos.

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  25. Enviado el 10/07/2012 a las 11:18

    Yo también tengo esa impresión de que hay carreteras que se te quedan grabadas a fuego en la memoria y tienen un significado que tal vez nadie más comprende. Me pasa continuamente que la gente no entiende por qué me voy por determinados caminos… porque tienen algo especial.

    Le voy a echar un vistazo al blog que has enlazado, por cierto. :) Me da que tiene respuestas que andaba tiempo buscando.

    Sobre los mojones, hiciste bien en seguir intentándolo. Me gustan mucho y es una forma de que no caigan en el olvido. El estado actual de algunos es penoso. Y los tuyos están muy bien.

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  26. Ya está inactiva ésta página?

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    1. Si te refieres a este blog, lleva cerrado casi dos años. Siguen activos los blogs EN LA CARRETERA y N-III UNA RUTA HISTÓRICA, del mismo autor. Saludos.

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